Entrevista
Arquitecto Francisco Guerra
Cuando pude ejercer la profesión, al ver la construcción de mi primer edificio, ¡materializadas mis ideas!, sentí una gran emoción, sentí que era lo mío, a lo que quiero dedicarme el resto de mi vida…
Arquitecto y urbanista por la Universidad Internacional SEK del Ecuador, Máster en Dirección de Empresas Constructoras Inmobiliarias, Universidad San Francisco de Quito, propietario de la firma Francisco Guerra Arquitectos, con operación en el Ecuador desde hace 6 años.
Joven arquitecto, con una sólida formación y experiencia, que le ha permitido desenvolverse con éxito en grandes proyectos, dejando su huella en el mundo del diseño arquitectónico de Quito. En esta ocasión, comparte con nosotros su aproximación hacia la arquitectura y sus pilares de trabajo.
- ¿Qué es para ti la Arquitectura?
Cuando pienso en Arquitectura, vienen a mi mente espacios conformados por varios elementos, tangibles (materiales de construcción) o no (luz, sombras, ventilación, asoleamiento), que el ser humano ha modificado para satisfacer sus necesidades. Espacios, que deben atender a tres factores fundamentales: forma, función y entorno; brindando a un espacio valor, a través de los cuales, expreso las ideas que busco plasmar en lo físico.
- ¿Cómo y cuándo te diste cuenta de que era tu vocación?
En el colegio San Gabriel, una de mis materias favoritas siempre fue el Dibujo Técnico, clase que me inspiró a seguir Arquitectura en la Universidad. Ya en la Academia, mis profesores de diseño arquitectónico supieron transmitirme su pasión por la carrera. Finalmente, cuando pude ejercer la profesión, al ver la construcción de mi primer edificio, ¡materializadas mis ideas!, sentí una gran emoción, sentí que era lo mío, a lo que quiero dedicarme el resto de mi vida. ¡Quiero dejar mi huella en la mayor cantidad de espacios y ciudades posibles!
- ¿Qué corriente o estilo arquitectónico te sirve de inspiración?
Siempre tengo como referente a los grandes exponentes de la arquitectura moderna como Le Corbusier, Mies Van der Rohe, Frank Lloyd Wright u Óscar Niemeyer, entre otros.
En la actualidad, es muy fácil conocer los nuevos proyectos que se están desarrollando en el mundo, acceder a las últimas publicaciones y libros; sin embargo, procuro quedarme con las ideas más sólidas y relevantes. Al comenzar un nuevo proyecto, elijo una imagen, artículo o frase que me ayude a darle forma. La expresión, “la forma sigue a la función”, del Arq. Sullivan, dice mucho para mí.
- ¿Qué es lo primero que analizas cuando te enfrentas a un nuevo proyecto arquitectónico?
Las necesidades del cliente, trato de entender lo mejor posible sus aspiraciones y metas con el proyecto. Luego, en la etapa de planificación y diseño, me encargo de que el proyecto se ajuste a sus requerimientos, a los del entorno y a los míos, por su puesto.
- Cada proyecto, sin duda, es un nuevo reto, ¿podrías contarnos más detalles sobre tu proceso creativo?
Comienza con las solicitudes del cliente. Al principio vienen muchas ideas a mi mente y las voy registrando, para que, de acuerdo avance, pueda saber si éstas son posibles. Siempre se deben analizar las ideas del cliente y evaluar si se pueden desarrollar o no, encaminándonos desde el inicio, hacia un mismo objetivo.
Hay que pensar mucho en las soluciones que se pueden presentar a los requerimientos del cliente, esto ayuda mucho a definir el concepto arquitectónico del proyecto. Es fundamental analizar factores macroeconómicos, de localización, de mercado, de costos, comerciales, legales y financieros. Luego entra la parte técnica, estructural y de normativa.
Con todas estas ideas un poco más claras y definidas, planteo el programa arquitectónico, el cual me sirve de guía para realizar el plan masa del proyecto y posteriormente poder realizar el proyecto arquitectónico definitivo y ejecutivo.
- ¿Cómo se diseña un proyecto con un equilibrio razonable entre valor arquitectónico, utilidad y costo?
Ese es mi secreto – dice entre risas -, siempre hay que analizar a qué segmento económico pertenece el cliente o va dirigido el proyecto, esto ayuda mucho a definir el tipo de materiales, la cantidad de personal, los detalles, los recursos, entre muchas otras cosas que puede presentar el trabajo.
Para proyectos inmobiliarios particulares o empresariales, es muy importante realizar el análisis financiero estático y dinámico. Siempre es importante realizar un buen análisis de costos directos e indirectos, ya que éstos influyen mucho en el éxito del proyecto.
- ¿Qué es lo que caracteriza al Arquitecto Francisco Guerra?
La búsqueda incansable de finalizar un proyecto con éxito, con un cliente feliz y satisfecho, que cumpla tanto con sus expectativas como las mías. En el camino, hago todo lo que sea necesario para cumplir con los objetivos trazados, esto habla de mi marca y calidad de trabajo; una constante en mí accionar, desde las remodelaciones más pequeñas, hasta los proyectos más grandes.
- ¿Qué compromiso debe tener un arquitecto con la sociedad?
El arquitecto debe ser un mediador entre las necesidades del cliente y del entorno. Debemos pensar siempre en aportar a la ciudad, intentar dar en los proyectos espacios de descanso, de recreación, de libre acceso, que tengan intercomunicación entre lo público y lo privado, sin comprometer la seguridad en la propiedad privada.
La Arquitectura es un reflejo de la sociedad materializado en proyectos inmuebles y espacios públicos, y creo que cada arquitecto debería plasmar en los proyectos su perspectiva de ésta.